martes, 29 de enero de 2013

Papá, mamá, me voy.



Vaya por delante que no estoy ni en contra, ni a favor, de la independencia de ningún territorio. Tenga, o no, una historia más o menos larga que la avale. Tenga, o no, una diferencia singular con la nación de la cual se quiera independizar. Tenga, o no, una lista de agravios contra su población.

Todo el mundo tiene derecho a sentirse dentro o fuera de una nación, aunque viva de ella, aunque viva dentro. Todos hemos vivido en una casa de la que alguna vez nos quisimos ir, aunque nos estuvieran dando de comer, o nos dieran para salir de fiesta. Renegamos de la casa paterna cuando nos imponían unas reglas que no nos gustaban, que no nos parecían correctas ni justas, aunque unos vivimos un tiempo aun al calor del hogar y otros nos fuimos con lo puesto. Unos se fueron para no volver jamás, y otros regresaban desde su independencia para lavar la ropa y llevarse aun un Tupper con el cocido de mamá. Cada cual tiene una idea distinta de lo que es ser independiente.

Pero con las naciones pasa como con los hijos, que un día son padres también y no ven que hay hijos más rebeldes que otros o simplemente que también desean su independencia.

En los casos más cercanos que tengo, Catalunya y Euzkadi, pasa lo mismo. En el País Vasco muchas voces se levantan contra la nación que les oprime y buscan en los anales de la historia (acertadamente o no) la diferencia total, incluso racial y de RH sanguíneo, con el estado en el que se incluyen. Encuentran las diferencias y claro, encuentran las similitudes con otras zonas limítrofes para concluir con la creación de una gran patria vasca. Que yo no critico, reitero, el que uno no quiera pertenecer a algo.

Sucede que como en casa, cuando te haces padre, también te salen hijos que son rebeldes o que no quieren que salgamos de la casa de la abuela. El nacionalismo quiere fundar o refundar la patria de los vascos. Independientemente, nunca mejor usada, de que los territorios estén en el estado español o francés. Todas las provincias vascas deben estar bajo la misma bandera. Así se reunirán, algún día, las provincias y territorios del Departamento de Pirineos Atlánticos de Francia, es decir: Bizkaia, Araba, Gipuzkoa, Lapurdi, Zuberoa, Nafarroa Beherea y Nafarroa (o lo que es lo mismo Vizcaya, Álava, Guipuzcoa, Labord, Sola, Baja Navarra y Navarra).

Hasta ahí todos contentos, si no fuera por dos asuntos. El primero de ellos, que la frontera de ese hipotético Euzkadi independiente está basado en las fronteras actuales de esas provincias/departamento. Bueno, si nos ponemos puristas se debería estudiar desde qué época se puede considerar el territorio vasco en su totalidad. Una fecha concreta con unos límites concretos. Quizás fuera más territorio, aunque quizás fuera menos. El caso es que no hay una fecha concreta en que existiera ese Euzkadi del que tomar referencia. Ahora vamos a por el segundo asunto. Imaginemos que aceptamos “barco” como animal acuático y tomamos las fronteras actuales. Resulta que no todos los territorios “vascos” quieren ser vascos, y que no todos los territorios que sí quieren ser vascos quieren la independencia. A saber: Navarra no se considera Nafarroa, sino una comunidad distinta. Los pamploneses no se llaman a sí mismos iruñetas. Pamplona es el nombre que siempre tuvo esta capital desde que los romanos la fundaron allá por el siglo I a.C.
Es cierto que el nacionalismo vasco está intentando buscar todo lo que puede relacionar a Navarra con los antiguos vascos. Cierto es también que lo que no encuentran lo adaptan. Así hacen derivar Navarra de una palabra vasca “naba” que significaría lugar llano entre montañas  porque así es el territorio cercano a su capital, cuando el estudioso Lekuona  decía que era de la palabra castellana derivada del árabe “naha”, tierra de ribera . Todo esto es algo que aunque esté aceptado por la Academia de la Lengua Vasca, es cuestionable. Pero eso es de otra discusión. Lo que aquí vengo a referir es que los nacionalistas vascos tratan de meter en el País Vasco a un territorio que no es vasco. Y por si esto fuera poco, existe una provincia que es muy poco o casi nada nacionalista, que es Álava. Mi pregunta es, en un hipotético referéndum de independencia, ¿se aceptaría la no inclusión de Álava y Navarra en Euzkadi? Si se pide respeto a las ansias soberanistas de unos, habría que respetar también la ausencia en otros o la consideración de no pertenecer a una nación concreta. Si tú, vasco, no te sientes español, quizás un navarro no se sienta vasco. Y es tan loable lo uno como lo otro.

En Catalunya pasa tres cuartos de lo mismo. Basan su estado independiente en unos territorios que nunca lo fueron ya que siempre perteneció a otro, cuando no fue aragonés, fue francés. Pero como pienso que el que no quiera vivir en casa puede irse y quizás algún día hasta yo me plantee el nacionalismo y quiera salir de España, pues pongamos que tienen razones para independizarse, sean verdades como puños o sean solo ganas de ir por libre. Los Països Catalans ¿aceptarían el que los valencianos y baleares quisieran independizarse de ellos cuando se creara ese país? ¿Aceptarían el que no quisieran salir de España? ¿Aceptarían el que por ejemplo los araneses quisieran ser solo araneses y no catalanes? ¿Les impondrían el catalán cuando ellos hablan un dialecto occitano? ¿Pelearán vascos y catalanes por ese pedazo de tierra hermosísima que hasta el siglo XIII hablaba también dialecto vasco? ¿Conquistarían las comarcas del Carche murciano y las comarcas del Cinca y Ribargorza en Aragón?

Es que cuando te quitas los padrastros con pinzas hay que tener cuidado porque te puedes hacer un jirón que duele más que lo que antes molestaba. Cuando te quieres ir, antes debes saber qué te puedes llevar y qué no, y quién se quiere venir contigo o quedarse, o hasta irse por su cuenta.


lunes, 28 de enero de 2013

Enamorarse, o la droga del corazón

Esta entrada se me ocurrió como respuesta a otra de un blog al que encontré por casualidad por estos mundos electrónicos.

               Será el corazón, será el cerebro, será la piel... el caso es que cuando nos aprieta ese ahogo en el pecho, nos late fuerte en las sienes, nos hormiguean los brazos y nos hace cosquillas el estómago es una suerte. Quien no haya sentido nunca eso, no sabe lo que se pierde. Al igual, quien lo ha vivido y ya no lo siente, sea por rutina o desamor, se entristece. Hay que enamorarse más de continuo, aunque sea un amor imposible (que son los que más cunden por el hecho de no consumirlo nunca), aunque ya tengas pareja.      

               El enamoramiento está en una esfera distinta del cariño, del "querer". Te enamoras de una canción, de una pintura, de una casa, de un coche. Son amores o sueños irrealizables. Enamoramiento al fin y al cabo. Pero también, aunque estés feliz con tu pareja, puedes enamorarte de otra persona. Es más, debes enamorarte. Algunos dirán que es una falta de respeto. Yo pregunto ¿porqué? Amas a tu pareja, la respetas, la quieres, la deseas. Pero tu corazón ya no late desbocado imaginando un roce con una mano, una cruce de miradas. Ese enamoramiento que te hace vivir una sensación de sueño irrealizable. 

                 Conviene claro está, por el bien de tu vida sentimental y diaria, que ese enamoramiento sea controlado y efímero. Que además sea inconcluso. Una droga que a veces debemos tomar para salir de la realidad y soñar de nuevo, sea por un día, una semana o un mes. Son enamoramientos que tienen final dulce, porque nunca esperas que el otro lo sepa, porque nunca te hará daño cuando desaparezca. Porque las heridas en el corazón, las soportamos mejor cuando somos jóvenes, y además son necesarias para crecer y apreciar el amor de verdad. Quién nunca ha roto su corazón es porque nunca ha amado, y sería muy triste morir sin haberte nunca enamorado. Pero llegada cierta edad, en la primera madurez, hay que saber dosificar esa droga. Hay que consumirla para no consumirse, pero sabiendo que es un sueño, y que como tal, al despertar, quedará solo en el recuerdo sin que se mezcle con lo cotidiano, que es lo que de verdad te alimenta y te hace caminar. 

                 Hay que ir al reino de los dioses, sentarte a la mesa, comer lo que quieras, pero no debes traerte nada contigo cuando regreses.

miércoles, 16 de enero de 2013

Los políticos NO son unos privilegiados




Cada vez se oye hablar más sobre los privilegios de los políticos. Caemos en el error de creer que los políticos son una élite. Es falso. A este le ha dado fiebre, pensareis.

En política no existen privilegios. Los políticos son servidores del ciudadano. Así es como se entiende la política.

Hasta aquí, lo que debería ser la realidad. En España en concreto, que es lo que conozco, en la práctica existen muy pocos políticos. Lo que hay en España, desde el simple ayuntamiento de pueblo hasta el Congreso, son corruptos, corruptores y corruptibles. Representan el 90% de cargos públicos.

Los corruptores son evidentemente los empresarios (de toda índole y tamaño) y todos aquellos que encuentran un beneficio directo en los políticos de turno que ofrecen, a cambio, dinero o privanza. El político de turno prevarica ofreciendo al empresario beneficios en la administración a cambio de dinero en efectivo o colocación profesional, propia o de algún conocido o familiar.

El corrupto es lógicamente el conseguidor. Sabe que está en una supuesta élite con fecha de caducidad. Por tanto, en los años que dure en el cargo público, tratará de buscarse para sí y para los suyos un futuro acomodado y holgado. Desde sus posibilidades, o corrompiendo a su vez a otros, conseguirá beneficios para los corruptores arriesgándose incluso a perder la libertad y el honor, aunque todos sabemos que el honor hoy en día se suple con una buena cartera repleta de Euros para comprarlo. Los provechos son tan suculentos que el riesgo merece la pena. La mayoría de corruptos logran colocar a conocidos y familia en empresas y cargos para los que no estarían acreditados. Ellos mismos son beneficiarios de esas colocaciones, como padrinos mafiosos, en las que el fulano le estará eternamente agradecido y siempre le deberá un favor ampliando el círculo de corruptos. Ocuparán, una vez acabada su carrera política, cargos importantes en las mismas empresas que les corrompieron y a las que beneficiaron. Se cierra así el círculo.

Los partidos políticos, por su configuración y su forma jerárquica, son los principales viveros de corruptos. Hay quien dice que los partidos políticos no son necesarios. Si no existieran viviríamos en una Dictadura o una Anarquía. Es decir, no habría pluralidad de opiniones y control o en el caso contrario, cada uno iría por su cuenta y sería el caos. Lo que ocurre es que los partidos políticos están organizados por corruptos que premian la fidelidad y la obediencia. Es la manera de escalar puestos dentro de la estructura de partido. Entre los que, con más o menos honradez e ilusión, ingresan en un partido se escogen a aquellos que demuestran ser perfectamente corruptibles. Poco a poco van coronando niveles hasta llegar a algún puesto desde el cual, tal que atalayas, pueden hacer favores a los corruptores. Entran en el círculo vicioso.

¿Cómo se mantiene este círculo? Mediante los pactos. Los corruptores costean los procesos por el cual los corruptos pueden ser procesados. Los partidos pactan entre sí para crear el tejido legal que prevenga la ejecución de dichos procesos. Todo lo que vemos sobre acusaciones y denuncias entre partidos es simple juego de tronos. Sirve para cambiar el color de los gobernantes, luego quedan en agua de borrajas. Los procesados continúan en sus puestos mientras dura el proceso, y aun siendo condenados, vuelven de nuevo a la carga una vez pagan la multa impuesta. Todo son cortinas de humo para disimular otras corruptelas más importantes. Cuando de verdad sale a la luz una posible gran estafa pública, siempre sale a su vez otra de menor entidad que llega a término, para diluir la mayor. Es como aquello de que se coge un alijo de droga de un pequeño traficante, delatado por los mismos que están introduciendo un cargamento exponencialmente mayor por otra vía.

Esto es algo que todos sabemos pero dejamos pasar, porque mientras nos dejen vivir cómodamente que hagan lo que quieran. En España no denunciamos al vecino que estafa a Hacienda porque pensamos que Hacienda nos estafa más a nosotros. Es como aquella parte de “Lazarillo de Tormes” del racimo de uvas. El ciego trajo un racimo e invitó a Lázaro a que, para no tomar más uvas uno que otro, comerían un grano cada vez. Al acabar, el ciego dijo a Lázaro que sabía que le había estado engañando cogiendo tres granos. ¿Cómo es posible que lo sepas? Pues por que yo tomaba dos granos cada vez y no dijiste nada.

Los políticos son necesarios, pero debe haber un órgano exterior que los controle para evitar la corrupción a la que cada vez estamos más acostumbrados. Ese órgano debe estar compuesto por los jueces, si existiera separación de poderes, y por los ciudadanos que los denuncien. Entre los ciudadanos y los jueces debe haber un intermediario que ponga en contacto a unos y otros y estos no son más que los comunicadores. Periodistas de gran talla que no teman investigar, periódicos independientes que saquen a la luz los temas investigados por las denuncias ciudadanas y a los que los jueces tengan por creíbles. Por desgracia, en los pactos antes mencionados está también la imposibilidad de que la ciudadanía denuncie hechos que saben a ciencia cierta. Por miedo a posibles represalias, o por imposibilidad material de presentar cargos contra administradores públicos. La nueva ley de tasas ha hecho flaco favor, como los propios jueces han denunciado, para que la justicia llegue a todos. Nos quedamos con la simple idea de que la impugnación a una denuncia de tráfico será más cara que la propia multa, cuando en realidad es un intento de proteger a los corruptos. Denunciar será caro para quitar la intención antes de que se produzca.

Los políticos viajan en primera, no pagan en el bar, reciben regalos personales, etc. Eso es lo que más se oye sobre ellos, son los privilegios que más denunciamos en las tertulias y mentideros. Claro que no deberían tener estas prebendas, pero eso solo es la punta del iceberg. El mayor “privilegio” que ostenta un político es la impunidad. El resto de privilegios son inherentes a su cargo y son temporales. Se les permiten por el hecho de que sirven a los ciudadanos. No deberían tener permitida una hoja en blanco para vivir como reyes el resto de su vida y la de sus hijos, a costa del sufrimiento de los ciudadanos a los que representan y con el dinero de todos.

viernes, 11 de enero de 2013

Un cuento de Navidad

Adaptación del famoso cuento de Charles Dickens, por Antonio Rodríguez.


Mariano se acostó aquella Nochebuena como un día cualquiera. Afuera la gente gritaba porque querían más dinero. Hasta ahí podíamos llegar, con la crisis que le habían dejado.
Había estado todo el día en el Congreso, trabajando por el país. Los sindicatos le habían pedido que aflojara un poco los recortes que durante todo el año habían ahogado, según ellos, a los ciudadanos.

-          Paparruchashhh. – dijo al recordarlo.


¿Es que no eran conscientes de la cruda realidad? Las arcas públicas estaban vacías, el FMI le reclamaba más recortes y Ángela, ¡Ah, Ángela! Siempre quería más.

Sus amigos los empresarios y banqueros le habían palmeado la espalda, y estos sí que sabían de economía, no esos obreros pestilentes. Pensando en los próximos presupuestos en los que tendría que recortar más aún se durmió.
De pronto, a eso de las 2 de la madrugada una leve lucecilla le despertó. Creyó estar soñando, pero allí delante de su cama había una figura familiar. Estaba rodeada de un halo de luz. Vestía un uniforme militar con una banda morada y varias condecoraciones.



-          Pero, ¿esh ushted Don Francishco? –dijo restregándose los ojos.
-          Sí Marianito, soy el Caudillo. Soy el “Espíritu de las Navidades Pasadas”.
-          Pero shi eshtash muerto y enterrado bajo una gran losha de mármol en…
-          Ay Marianito hijo, que torpe estás. Te he dicho que soy un espíritu. Anda dame la mano que vamos a hacer un viaje.
-          Pero tendré que ponerme algo, que no quiero shalir como Eshperanza cuando regreshó del atentado de Bombay con aquellosh calcetinesh horrorosos…
-          Anda Marianito, déjate de tonterías que no tengo todo el blog para mí solo. Tú dame la mano que yo te guío. Y por cierto, ¿que estás haciendo con Iberia jomío? Mira que era una compañía de altos vuelos… me estás dejando España a la altura del betún. Pareces un rojo.

Mariano le dio la mano al Caudillo y de pronto se formó una nube alrededor. La habitación de Moncloa se esfumó y todo se volvió en blanco y negro. De fondo se oía una musiquilla conocida

-          Paaa, parará pararapapapapapaáaaaaaaaaaaaa… pa parapapa, pa papaparararaaa. (música del NODO)
-          Uy, que recuerdos me trae Excelencia.
-          Sí hijo, pero mira, mira.

De pronto ante él surgió una imagen reconocible. Era la Calle Preciados de Madrid, pero todo se veía en blanco y negro. La gente se agolpaba en Galerias Preciados y salían y entraban de los grandes almacenes. La Puerta del Sol bullía. Por doquier había gente con bolsas de regalo. “Gentes bien”, aunque también mucha gente normal y hasta señores con boina calada y chaqueta de pana y señoras de pañuelo y toquilla se arremolinaban junto a la castañera que repartía cartuchos de papel que los niños, sorbiendo mocos, cogian resoplando con sus manitas enguantadas en punto inglés. Los tenderos sonreían y se saludaban. La gente se deseaba felicidad tocándose el sombrero o levantando la manita.



-          Qué te parece Marianito. Estas son las Navidades pasadas. La gente tenía poco pero para eso creé los “economatos” para que los que ganaban poco estuvieran cubiertos en todas sus necesidades. Mira, esa señora anciana vive con sus hijos y gracias a ellos y a su paguita está feliz. Ese vecino de ahí no se preocupa por la operación de garganta de su hija porque la Seguridad Social se la va a pagar. Y el conserje se lleva este mes su paguita extra y así le ha comprado el caballo de cartón que quería su hijito pequeño. Todo está bien, los ricos son ricos y ganan mucho dinero, los comerciantes venden y mantienen sus tiendas, los obreros trabajan y alguno rojillo hace huelga (pero con una buena cucharada de aceite de ricino se le quitan las ganas por una temporada), los pobres, bueno los pobres piden y alguien les da. El campo es verde, el mar azul, Iberia es española como RENFE y el Madrid gana las ligas y las copas del Caudillo. España es feliz Mariano.
-          Puesh shí que she lesh ve felicesh, shí. Eso es lo que debe ser Eshpaña, un remansho de paz.
-          Pues pedazo de borrico, – dijo al tiempo que le soltaba un pescozón – todo eso que yo logré, aunque hubiera algún rojo como ese Santiago que ahora juega al mus en el bar “Nube 5ª” del cielo según se sube con Manoliño, que me llamaba dictador, te lo estás cargando, Mariano.
-          Pero shi no shoy yo, Excelencia. Esh Angeliña que me exige y me exige, y yo no puedo negarle nada. Ella me ha pueshto donde eshtoy y qué quieres que te diga Paquito.
-          ¡Cómo que Paquito! Para ti Caudillo o Excelencia. A ver si te fusilo y te tengo toda la Eternidad de capitán de jardines limpiando letrinas de un cuartel de la Legión. Anda volvamos a casa, que veo que no te enteras.

La imagen se desvaneció y volvió a estar en su cama. Don Francisco había desaparecido y todo estaba como antes.



-          Paparruchash – volvió a decir.

Se disponía de nuevo a dormir cuando una luz se volvió a formar delante de su cama.

-          ¿Don Francishco?
-          No Mariano, soy José.
-          ¿Joshemari? – dijo temblando.
-          Que no Mariano, José Luis. ZP, ¿recuerdas? Soy el “Espíritu de las Navidades Presentes”.
-          Coñe, shi creía que habiash emigrado al Caribe con tu querido Hugo Chavesh.
-          Déjate de coñas y arriba, que tenemos que seguir con la visita.
-          Pero esh que eshtoy canshado ZP – Zapatero alzó las cejas -. Perdón, Joshé Luish.
-          Ni cansado ni porras, estarás cansado cuando lleves 8 años, como yo, discutiendo con los líderes de Europa y la Alianza de Civilizaciones sin entenderles ni papa. Venga dame la mano.

Mariano se agarró a Zapatero y de pronto se vio en la Puerta del Sol de nuevo. Esta vez al menos era en color. Pero el panorama era distinto. Por una de las calles avanzaba una marea de personas vestidas con camisetas verdes. Todos gritaban como locos.



-          Pero que shucede Joshé Luish, ¿esh una cabalgata de algo?
-          No Mariano, son profesores, estudiantes, padres y hasta rectores de la Universidad.
-          Y qué van, ¿de excurshión quizásh? Recuerdo con los Hermanitosh que cuando era niño…
-          No Mariano, pichorra. Que no te enteras. Se manifiestan contra los recortes en Educación. Que ahora solo van a poder estudiar los hijos de papá. Que vale que ahora hay muchos jóvenes que pasan de todo, pero vamos camino de tener una juventud analfabeta, inculta, que solo querrá cachondeo, droga y alcohol y folleteo con un famosete para ganar dinero. Vamos como ahora pero en grado sumo.
-          Puesh como debe sher. ¿O esh que un hijo de un albañil va a poder sher abogado? O médico. Eshosh jóvenesh greñudosh y porretash que she rejuntan shin casharshe ni nada, que she vishten con camishetash y llevan “pirshinsh” y tatuajesh, que no dejan el móvil ni el “Feishhhhbuk” mash que para dormir, y she llevan todo el día con losh ShMSh’sh quedando para manifash y acampadash en lash plazash.
-          Claro Mariano, pero eso (aunque yo tampoco lo sabía) se llama “movilización solidaria”. Hablando de médicos – dijo Zapatero al tiempo que señalaba a otra de las calles adyacentes. Una marea humana, esta vez vestida de blanco, avanzaba por la calle gritando.
-          Y eshtosh ¿shon también manifeshtantesh?
-          Ahí has acertado Mariano, son médicos, enfermeros, trabajadores de la Sanidad y pacientes.
-          ¿Y también eshtán cabreadosh por losh recortesh? Pero qué quieren, lash endodonciash cueshtan muy carash. ¿Cómo quieren que paguemos todash lash medicinash que quieran?
-          Mariano, has quitado de la Seguridad Social medicamentos esenciales para enfermedades muy comunes y otros muy caros de enfermos crónicos. Sobre todo los viejecitos que ahora tienen que pagar parte de la receta aunque ya lo hayan hecho cuando trabajaron con tanto esfuerzo por dejarnos una España mejor. Si Franco levantara la cabeza.
-          No me hablesh de Franco Joshé Luish, no me hablesh – dijo al tiempo que se rascaba el collejón que aun le dolía.
-          Pero que esh aquello.
-          Ah, son funcionarios. Es que les han obligado a trabajar más horas que el Tato, y les han quitado la paga extra, pero la que más jode, la de diciembre. Además están pensando en despedir a gente porque quieren cerrar empresas Públicas y Administraciones.
-          Puesh claro Joshe, esh para ahorrar en gashto público, que she te fue de lash manosh, mocito. Que la gente decía que eshtaban todo el día rashcandoshelosh y que no hacían nada. Y la paga de Navidad puesh también para ahorrar. Que hay muchash duplicidadesh y funcionariosh.
-          Sí Mariano, pero no recortas en coches oficiales, ni en sueldos de diputados, ni en consejeros, asesores, secretarios, asesores de asesores de secretarios. No recortas en presupuestos para gilipolleces como un AVE a Girona que no va a coger nadie. O como tu gente en la Comunidades Autónomas haciendo aeropuertos donde no van ni los gorriones, a cambio de trajes y billetes de lotería premiados. Mariano, que se te ve el peluquín.
-          No esh peluquín, esh mi pelo, teñido, pero esho no she lo cuentesh a Ángela.
-          No te enteras, y mira que yo no me enteraba, pero tú me dejas por espabilado Marianito.
-          Uy mira, una manifeshtación de bomberosh.
-          No Mariano, los bomberos son esos de aquella calle que vienen junto a los mineros y los de Astilleros. Y esos son jueces, que protestan por las tasas por las que un trabajador tendrá que pagar por demandar a su jefe que le explota más de lo que recibirá si gana y por la que los obreros no podrán divorciarse siquiera. Y esos son artistas que protestan por la subida del IVA en la maltrecha Cultura. Que un libro cuesta casi como una cena. Y una noche en el cine con los niños como un fin de semana en Benidorm. Esos que vienen por ahí son autónomos, que se creian que iban a lloverles el dinero contigo pero ven que si no son el Corte Inglés, Carrefur o Mercadona no venden un pimiento… pero estos no se manifiestan…estos están aplaudiendo a los que vienen por ahí, esos que tú decías que eran bomberos.
-          Y que shon, si traen cashco y botash.
-          Antidisturbios.
-          Y que piden eshtosh ¿másh pagash?
-          No, Mariano, mira. A estos no les importa una mierda que les hayan quitado la paga, ellos se la cobran con las extras que hacen durante todo el año. Estos te pedirían más pelotas.
-          Uy, pero shi yo pelotash… ejem.
-          Pelotas de goma, Mariano. Y como mucho te pedirían una ley de vagos y maleantes de nuevo, como esa de que los manifestantes son terroristas. Estos vienen a limpiarte las calles.
-          Ah, que ahora trabajan en el Shervicio de Limpieza.
-          Anda Mariano, volvamos a casa. Pero menos mal que soy un espíritu y podemos volver en una nube, porque en Iberia va a ser difícil, como la están desmantelado los British (mira hablo como tu con la sh) y en metro, casi mejor andando. Y ni se te ocurra ir al Super, que te clavan con el dichoso IVA, que para comprar pollo ahora hay que pagar hasta el pienso que se comió.

Regresaron a Moncloa y Zapatero se esfumó entre nubes. Se arrebujó entre las sábanas de nuevo y quiso dormir, pero por algo no podía conciliar el sueño. Fue entonces cuando apareció un hombre con barba entre un halo de luz.



-          A ti shí te conozco. Tú eresh Alfredo ¿verdad?

Alfredo Perez Rubalcaba asintió pero no dijo nada.  Se limitó a tender la mano.

-          ¿Eresh también un eshpíritu? – Alfredo asintió -. El “Eshpíritu de lash Navidadesh Futurash” a que shí. Lo shabía. Shoy un hacha.

Alfredo volvió a tenderle una mano y a hacer un gesto con la cabeza para que le siguiera.

-          Pero porqué no me hablash. Qué te he hecho yo. – el espíritu se encogió de hombros -. Ya, no hablash para no cagarla. O para dejar que me eshcogorcie y recoger tú losh pedazosh. Que zorrón eresh, Alfredo. Shi parecesh a mí en 2011, ladrón. Como hash aprendido de un maeshtro, eh.

Alfredo estaba ya un poco harto y cogió a Mariano de la mano. La habitación volvió a desaparecer ante sus ojos y en su lugar apareció en una Puerta del Sol vacía.

-          Pero qué esh eshto. En Navidad y nadie por lash callesh. ¿Hay una huelga o esh que dan el menshaje de Shu Majeshtad y la gente ha decidido por fin verlo? – Alfredo negó y le señaló a un hombre que pasaba por allí arrastrando los pies -. Dígame buen hombre, en qué año eshtamosh y dónde eshtá la gente.
-          Parece usted un poco lelo – dijo el hombre arrugando la frente para verlo mejor – Estamos en 2015 hombre. Y la gente… pues la gente. No sé donde andará.
-          Pero, cuénteme, que ha shido de Eshpaña en eshtosh últimosh añosh.
-          Pues verá, como veo que anda usted un poco despistado le haré un resumen. ¿Ve usted eso que antes era el edificio de la Comunidad de Madrid? Pues ahora es el Banco de España. Es el único que existe, porque compró a todos los demás para asumir sus deudas. En el edificio del Ayuntamiento ahora hay una iglesia, es de las únicas entidades que ha ganado dinero. Por cierto, ahora dan allí las pautas para vivir como Dios manda. Y eso que ellos deben saberlo bien porque viven como Dios.
-          Pero ¿Y la gente?
-          Pues verá ¿recuerda usted aquel programa de televisión “Españoles por el mundo”? pues bien, ahora hay uno que se llama “Españoles por España”. En él salen los pocos españoles que han quedado aquí. Les preguntan por su vida y como sobreviven. Es para que lo vean sus familiares que están repartidos por Alemania, Bélgica, Canadá y Laponia. El resto, los que nos quedamos aquí sobrevivimos como podemos, aguantando lo que quieran hacer con nosotros.
-          Vaya, ¿y hablando de Alemania, qué fue de Ángela Merkel? – dijo con un suspiro ahogado.
-          Llegaron las elecciones en Alemania y la mandaron a tomar por culo, lo que nosotros no fuimos capaces de hacer aquí.
-          Y dice usted que el Edificio de la comunidad es un banco ¿y dónde está ahora la Asamblea de Madrid?
-          Pues como el resto de Juntas, Xuntas y Generalitats… se fueron al garete cuando fueron quitándoles funciones. Eran un fracaso es cierto, pero ahora el Goboerno Central lo manda todo como quiere. Ya Andalucía no es la rebelde autonómica que fue. Ahora allí gobierna como un califa, por fin, Javier Arenas. Todos sumisos.
-          ¡No me diga! Pero Cataluña, ¿Cómo ha permitido?...
-          Ah no, Cataluña se independizó.
-          ¡Qué me dices! ¿Y el Gobierno lo permitió? Que catástrofe.
-          Bueno el Gobierno se vio acojonado por los militares retirados de bigotito canoso de lápiz que querían llenar la Plaza de Catalunya de tanques, como en Chile. Y por Intereconomía, El Mundo y La Razón entre otras, que se llevaron seis meses como profetas del fin del mundo. Al final consiguieron que les dejasen administrar su Hacienda Pública, (que era lo que querían) pero cuando decidieron cerrar las Comunidades Autónomas, viendo que no iba a pasar nada (menos mal) se independizaron. Todo dios allí se puso a brincar como si fuera San Fermín. Ahora se han dado cuenta que todo sigue igual. Todo privatizado y los ricos llevándoselo todo calentito, que son los mismos que antes tenían el monopolio en España. Además, como todo lo importaban de España que era el único país con quien tenían acuerdos comerciales y era el único país que les compraban productos, pues como en España todo se fue a la mierda, Catalunya se fue a la mierda también. Eso sí, cayó encima de España y amortiguó un poco el golpe. Pero vamos, también hay “Catalans per Catalunya” en la tele. Allí no vive nadie tampoco.
-          Pero el nuevo gobierno, ¿no hace nada?
-          Esa es otra, el nuevo Gobierno es el mismo 4 años más. Verá, resulta que aquí solo quedaron los 10 millones de votantes del PP y los que no pudimos huir, que además nos importa todo un cojón y pasamos de ir a votar. Porque resulta que estamos en contra del sistema electoral y pasamos de dar el voto a nadie. Así que salió, esta vez con el 100% de votos. Lo malo es que no creo que se vuelvan a presentar en 2019.
-          ¿Y esho?
-          Porque ya no hay nada que privatizar ni que robar amigo. Por cierto, que se parece usted un montón al presi.
-          Ya, ya. Me lo dicen mucho shí. Ejem… ¿y aquí no había un colegio?
-          Había. Ahora es un chino, pero lleva dos años cerrado. Los colegios y los hospitales fueron vendidos a empresas de cuñados y hermanos de los mandamases, ¿sabe usted? Quedó alguno público que, la verdad, daba asco ir. La gente se iba muriendo por los pasillos, que parecía Beirut. Y como las farmacias eran lo más parecido al “Rincón del Gourmet”, pues aunque te recetaran no podías ir a comprarlo. O sea, que o te morías sin ir al médico por no poder pagarlo o te morías después comprando medicinas caducadas a bajo coste. Y como los niños ya no quieren ser ni príncipes ni albañiles, pues cerraron las universidades que no eran privadas. También, no vaya usted a pensar, cerraron los comercios. La gente no podía comprar nada. Empezaron a comerse las cosas caducadas haciendo caso al Ministro de Agricultura. Cerraron bancos, televisiones, vamos, cerró todo. Por eso no hay nadie por las calles. Los que aun quedamos aquí o no tenemos con qué comprar, o no tenemos dónde comprar, o tienen tanto que lo compran fuera.
-          Pero claro, el ZP lo dejó todo tan jodidamente mal… la crishish… la…
-          Laquesemurioenlaguerra… Zapatero lo hizo jodidamente mal, es cierto, pero lo de la crisis es una puta patraña para trincarse todo lo trincable y alimentar a los ricos con los despojos de lo público que habíamos pagado entre todos. Se cargaron la Democracia antes de que se hiciera una madurita interesante. Nos quisieron devolver a la época de Franco. Vamos que mientras en “Cuéntame” ya iban por el 2000, en la calle parecía que estábamos en los 50.  Ahora parece que estamos el día después de acabada la Guerra Civil.
-          Bueno buen hombre, le dejo. Que le vaya a ushted bien.
-          Gracias. Por cierto, ¿tendría usted un cigarrito? Es que hace un año que no fumo.
-          Ah, ¿lo eshtaba dejando?
-          No, es que no hay ni estancos ya. Además, no tengo un euro. Llevo 2 años parado. Antes era juez, pero como no hay quien pagara las tasas.
-          Mmmm… no fumo, lo shiento. Oiga, qué fue del Rey… shupongo que shigue entre noshotrosh, no.
-          Pues resulta que cogió lo que tenía en una cuenta en Suiza y se fue al Caribe. Le dejó al hijo todo el pastel. El yerno fue condenado a 130 años por chorizo pero un indulto lo sacó de la carcel junto a todos los imputados por el caso Palma Arena, el Gürtel y otros pocos más. Socialistas y peperos hicieron un acuerdo para que no se pudiera investigar más a ediles y políticos. Como tenían la mayoría en el Parlamento, salió adelante. El nuevo rey Felipe VI vive ahora en Roma con su madre, está divorciado y cobra seguros. En fin, me marcho que se hace tarde.
-          Vaya ushted con Diosh.


Alfredo, el espíritu que hasta entonces había permanecido callado, le tomó de la mano y le llevó por un manto de nubes de nuevo a su dormitorio. Una vez allí desapareció. Mariano se estremeció en su cama. Ya era casi de día. Era la mañana de Navidad. Pensó que tenía que hacer algo para evitar todo lo que había vivido aquella noche. El descalabro del país, la debacle de la nación, el precipicio de España. Se levantó y se vistió. Repasó mentalmente todo lo que iba a decir esa mañana en rueda de prensa especial. Mantendría la Sanidad y la Educación Publicas, impondría una tasa a los bancos y los regularía para que no pudiesen especular con las hipotecas y defraudar con las preferentes. Pensó también subir los impuestos de lujo y bajar el IVA de los productos más necesarios. Emitiría una ley para que los bancos intervenidos pudieran dar créditos a los emprendedores. Rebajaría los impuestos de actividades económicas. Reflotaría la compra de vivienda a bajo precio y sacaría a la venta a precios populares los pisos del banco malo. Llamaría a Ángela Merkel y en un perfecto alemán (con un traductor) la mandaría al carajo sin contemplaciones. Impulsaría la economía y eliminaría las duplicidades en las administraciones. Relanzaría la imagen de España y…

“ringggggg, ringgggg” – sonó el telefono.

-          ¿Shíiiiiii? – dijo en tono alegre con las fuerzas renovadas y el espíritu navideño iluminandole el rostro – Al habla Mariano I el benefactorrrrrr…
-          Veste a la mierrrda Mariano. Soy Josemari. Me ha llamado Monseñor Rouco, dice que ha tenido un sueño esta noche en que se le ha presentado Benedicto XIV. Dice que le ha dicho que has pensado no sé qué de hacer tonterias…


-          Ehm… verásh Joshemari. Esh que la cosha eshtá muy jodida y había penshao que…
-          Ni pensao ni ostias… tú a obedecer a la FAES, al FMI y a la Conferencia Episcopal. Que te lo tengo dicho Mariano, que sorpresitas nanai, que de ir por libre nanai… mira que te mando de registrador de la propiedad a las Chafarinas.
-          Vale Joshe, vale… me quedo en cashita como me dijishte. Venga, feliz Navidad y esho. ¡Viva el vino!
-          Chao Mariano.

Y Mariano se preparó para dar el discurso del balance del año. Todo debía aparecer como decía Josemari. “España va bien, no hemos tenido más remedio, esto es por lo que nos dejaron los de antes y te mato porque te quiero”.

Los cuentos, no siempre acaban bien.